Descubra la refinada elegancia que encierran estos delicados pendientes, elaborados con perlas chinas cultivadas de agua dulce de 4,5 mm, engastadas en un halo resplandeciente de diamantes blancos naturales. Cada brillante perla, un toque de sofisticación atemporal, se encuentra engastada en copa de oro blanco de 10 quilates con baño de rodio, lo que garantiza un brillo radiante y duradero. Rodeando estas gemas, los diamantes, con un peso total de 1/7 de quilate, color IJ y claridad I1-I2, deslumbran con un brillo enigmático que cautiva la luz y la imaginación. Diseñados para la comodidad con cierres a presión seguros, estos pendientes prometen no solo un abrazo cómodo a sus orejas, sino también un toque de opulencia que resuena con cada mirada.