Descubra la esencia de la elegancia con este exquisito collar colgante de oro blanco de 10 quilates, elaborado meticulosamente a la perfección. Con un fascinante diseño en espiral que encapsula un solitario de diamante natural redondo de talla brillante, esta pieza resuena con gracia y brillo. El diamante, impecablemente sujeto por un engaste en garras, deslumbra con una claridad inconfundible (I2-I3) y un tono sutil (IJ), reflejando cada destello de luz en su danza celestial. El baño de rodio realza el resplandor del oro blanco, garantizando su durabilidad y ofreciendo un brillo etéreo. Suspendido en una cadena de caja de 45 cm del mismo metal noble, el diseño se mantiene sofisticado a la vez que sencillo, asegurado por un cierre de reasa para una elegancia sin esfuerzo. Ya sea para realzar su atuendo diario o para acentuar su atuendo de noche, este colgante promete ser una preciada adición a cualquier colección.